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Según datos de CB Insights, en el 2019 había 310 unicornios a nivel global, sin embargo, para el 2020 el número se elevó a 569 empresas.
El ecosistema emprendedor registró un acelerado crecimiento de unicornios, al pasar de 310 en el 2019 a 2020 el número se elevó a 569 empresas
El término unicornio se utiliza para referirse a las empresas tecnológicas que, sin tener presencia en la Bolsa de Valores, logran una valuación de más de mil millones de dólares a partir del financiamiento de sus operaciones con capital privado, principalmente.
Este concepto fue creado por Aileen Lee, fundadora de la firma Cowboy Ventures, en el 2013, haciendo referencia a la especie mitológica “unicornio”, y argumentando que muy pocas empresas tecnológicas que son financiadas con capital privado logran dicha valuación en menos de diez años de su creación.
En los dos últimos años, el ecosistema emprendedor experimentó un acelerado crecimiento de este tipo de startups. Según datos de CB Insights, en el 2019 había 310 unicornios a nivel global, sin embargo, para el 2020 el número se elevó a 569 empresas.
De acuerdo con un estudio de Endeavor y Glisco Partners, en el 2021 las empresas emergentes registraron 15 mil millones de dólares de inversión para financiar sus proyectos. Por otro lado, cifras de la Asociación Mexicana de Capital Privado (Amexcap), indican que en el 2020 la inversión de capital privado creció 4.2 veces, debido a que los fondos de capital privado consideran que las startup representan una oportunidad para invertir su capital y obtener mayores rendimientos.
Asimismo, señala que las empresas enfocadas en tecnología son las que atraen mayor inversión del Venture Capital, ya que representan una mejor oportunidad para obtener mejores rendimientos.
En este contexto, muchas de estas empresas se sientes atraídas por el mercado mexicano, en primera instancia por la oportunidad de crecimiento que existe en diversos sectores como finanzas, comercio electrónico, seguros, educación, entre otros; y por otro lado, por la cultura de emprendimiento que hay en el país.
Cabe mencionar que la región latinoamericana concentra el mayor número de unicornios. Con cifras a mayo de 2022, Brasil es el país que encabeza la lista con 23 empresas de este tipo, seguido de México con 10; Argentina 8; Chile 3, Colombia 2 y Uruguay 1.
Durante la realización del Seminario-Taller para profesionales del Ecosistema Emprendedor de América Latina, 11st PRODEM, especialistas y fundadores de empresas unicornios de la región se reunieron para reflexionar sobre las lecciones que este tipo de empresas enseñan a los emprendedores.
En la conferencia Unicornios, ¿qué podemos aprender de ellos?, moderada por Juana Ramírez, presidenta del Consejo de la Asociación de Emprendedores de México (ASEM); Silvina Moschini, SEO & Founder de SheWorks! y productora ejecutiva de Unicorn Hunters; Loreanne García, Co-Founder & Chief People Officer de Kavak; Lucas Melman, Country Manager México de Betterfly y Cristina Cacho, Regional Director México de Clara, compartieron sus experiencias y coincidieron en que antes de que estas empresas se convirtieran en unicornios cometieron una gran cantidad de errores, mismos que tuvieron que aprender a sortear y solucionar.
Asimismo, los especialistas destacaron que elementos como la capacidad de adaptación y estar abierto al cambio son dos factores fundamentales para el crecimiento de un emprendimiento.
Por su parte, la cofundadora de Kavak, Loreanne García recomendó a los emprendedores definir con claridad las posiciones, áreas de acción y responsabilidades de los founders de una empresa y resaltó la importancia de asociarse con personas que compartan valores y la necesidad de desarrollar una cultura laboral en la que todos los integrantes se sientan cómodos.
Los cuatro fundadores de empresas unicornios aseguraron que nunca estuvo dentro de sus objetivos conseguir la denominación de unicornio. Sin embargo, mencionaron que consiguieron esta distinción después de buscar democratizar el acceso a oportunidades, a través de sus plataformas y soluciones, para beneficiar a una mayor cantidad de personas.
Finalmente, Lucas Melman, Country Manager México de Betterfly, mencionó:
“Hay que soñar en grande. Entender hasta dónde puede llegar el negocio, a dónde llega el mercado y crear algo que seguramente va a cambiar. Hay que estar dispuestos a cambiar mucho. Hay que pensar en grande, pero no pensar en ser unicornio y levantar dinero. Eso no puede ser el objetivo… La gran mayoría de estas empresas inicia con el propósito de cambiar al mundo”.
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