El ahorro en combustible y mantenimiento, la autonomía del vehículo, los diferentes beneficios fiscales y una tendencia por cuidar el medioambiente han hecho que empresas costarricenses se acerquen a las agencias comercializadoras para invertir en la migración de sus flotillas de autos de combustión a los eléctricos o híbridos.
El mercado nacional ofrece una variedad de opciones desde automóviles, sedanes, pickup, camiones de carga hasta motos, monopatines, bicicletas, y cuadraciclos. Estos últimos los venden en agencias especializadas.
Actualmente, la oferta hacia la movilidad eléctrica en Costa Rica responde a las necesidades actuales del mercado, esto quiere decir que aún cuando existen compañías interesadas en realizar esta transición, representan un porcentaje bajo de la participación del mercado.
No obstante, según Ana Lucrecia Vargas, directora de Mercadeo de Grupo Danissa (Nissan), la cantidad de unidades que llegan al país, se colocan fácilmente a una demanda con “apetito de llegar a la carbono neutralidad”.
Por su parte, Jorge Saborío, director de Transportes de Correos de Costa Rica, expresó que la cantidad de modelos disponibles están orientados primordialmente a la “sustitución individual” y no a una “sustitución a gran escala o flota completa de vehículos”, lo que incrementa el tiempo de espera entre la compra y la entrega de las unidades.
Las agencias de vehículos Hyundai Grupo Q, Motores Británicos y Grupo Danissa expusieron a EF su oferta actual de vehículos eléctricos para aquellas empresas que quieran transformar su flota empresarial. Algunas otras consultadas por EF como Automotriz (Ford y Volkswagen) no cuentan con vehículos de esta gama ni híbridos en su portafolio.
Pese a que en el país ya existe una oferta de vehículos eléctricos, aún no es masiva en los que usualmente se destinan para trabajo, por ejemplo las unidades de carga liviana.
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Hyundai, cuenta con dos vehículos eléctricos para el mercado costarricense que según precisó Nohelia Alfaro, gerente regional de mercadeo de la agencia, más de 20 marcas e instituciones del país han incorporado dentro de sus flotas de trabajo. Se trata del IONIQ (de 350 kilómetros de autonomía) y las dos versiones de KONA (limited de 312 kilómetros de autonomía y de prestige 482).
En 2018 la agencia ganó la licitación donde se les adjudicó la compra de 100 vehículos eléctricos para el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE). Esta empresa tiene actualmente la flota más grande de vehículos eléctricos del país.
“Hay clientes que buscan un ahorro, ya que con un auto de este tipo en sus flotillas pueden disminuir el gasto en combustible hasta en un 90% y aproximadamente un 70% en mantenimientos, pues no requieren cambios de aceites, bujías, filtros, entre otros”, explicó Alfaro.
La gerente de mercadeo también manifestó que, más que un tema de rentabilidad de las agencias en incorporar los vehículos eléctricos a su portafolio, se trata de que el público se “familiarice” con la movilidad sostenible y sus beneficios. Y para eso es necesario poner a disposición de los consumidores los diferentes productos de la marca para que los conozcan y los prueben.
Los vehículos eléctricos son susceptibles a programas de financiamiento verde y a los beneficios que otorga la Ley de Incentivos y Promoción para el Transporte Eléctrico (9518). Fotografía: Archivo GN.
Vargas de Grupo Danissa, indicó que en Agencia Datsun, ofrecen el modelo de auto eléctrico Nissan LEAF, con un costo de $43.500, e incluye el cargador de 220 voltios. Según indicó la ejecutiva, Nissan es “pionero” en la fabricación de autos eléctricos comerciales en el mundo, y luego de diez años del lanzamiento del LEAF se han producido y vendido “más de medio millón de unidades”.
“Costa Rica sigue esa tendencia y poco a poco va creciendo. Estamos atravesando una etapa de transición para adoptar los autos eléctricos. Este periodo es lento pero muy positivo”, dijo Vargas.
El modelo ofrecido por Grupo Danissa, así como la demás oferta de las agencias, son susceptibles a programas de financiamiento verde y a los beneficios que otorga la Ley de Incentivos y Promoción para el Transporte Eléctrico (9518).
Entre estos estímulos están la exoneración de manera gradual a los propietarios del pago del impuesto a la propiedad (el rubro más importante del marchamo), la no aplicación de la restricción vehicular regular (la sanitaria sí aplica), acceso a parqueos azules y puntos de carga gratuitos en instituciones públicas y comercios, y la exoneración del pago de parquímetros en las municipalidades que tengan disponible esta opción.
Por otra parte, la agencia Motores Británicos cuenta en su portafolio con un vehículo 100% eléctrico, el MG ZS, para que las empresas puedan optar en su flota.
Gerardo Beita, gerente de Motores Británicos, expresó que esperan a corto y medio plazo todo el parque vehicular migre a la tecnología eléctrica. “En continentes como Europa y Asia se está observando el crecimiento que está teniendo MG Motor, tanto en ventas como en el catálogo de productos eléctricos. Este crecimiento en el portafolio llegará a nuestra región para 2023″, dijo Beita.
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Los vehículos de Correos de Costa Rica son utilizados por sus mensajeros en la última milla, que es la entrega de los envíos a los clientes. Fotografía: Cortesía Correos de Costa Rica.
Compañías como el ICE, Walmart, Schneider Electric y Correos de Costa Rica han migrado sus flotillas de autos de combustión a carros eléctricos.
La gerencia de Electricidad del ICE, afirmó a EF por medio de correo electrónico que son múltiples los beneficios que aporta la transición a la movilidad eléctrica para las compañías, pero sin duda el diferencial más importante está en la compra de combustibles fósiles y el uso de electricidad renovable.
El ICE ha logrado ahorros cercanos a los $144.000 en la compra de combustibles, además de costos en lubricantes y repuestos. El Instituto emplea sus vehículos principalmente en funciones administrativas. En el caso de la Compañía Nacional de Fuerza y Luz, los vehículos son destinados para transporte de carga.
“Es rentable migrar las flotas, pues entre más kilómetros recorre un vehículo eléctrico, mayor es el ahorro percibido. Además, la reducción de emisiones genera un beneficio directo en la salud pública. El país cuenta con la infraestructura necesaria para que las empresas puedan aplicar la transición”, expresó la Gerencia en el correo electrónico.
Correos de Costa Rica inició la transición de sus vehículos para la “última milla” de las entregas de paquetes en 2018. Para ese momento, la oferta era bastante reducida, manifestó Saborío, director de Transportes.
Para el 2021, las 49 motos eléctricas con las que cuenta Correos de Costa Rica realizaron un recorrido total de 547.225 kilómetros, que resultó en un ahorro económico en la factura de combustible superior a los ¢15 millones. Asimismo, redujeron los gastos en la cuenta de mantenimiento por alrededor de ¢1,8 millones (repuestos, filtros y aceite).
“Nuestro impulso fue optimizar los procesos de transporte y distribución, enfocándonos en la filosofía de mejora continua y adaptarnos a las nuevas tendencias que nos permitan maximizar nuestros recursos y ajustarnos a las necesidades actuales. Es así como logramos posicionarnos como la empresa líder en logística carbono neutral”, dijo Saborío.
Actualmente, el ICE lleva acabo un plan piloto para la implementación de la electrificación del transporte público en la modalidad de autobuses y Correos se encuentra en un proceso de contratación de 15 triciclos eléctricos con el fin de tener una mayor capacidad de carga.
Schneider Electric, también cuenta con su línea de cargadores para vehículos eléctricos EV Link, disponible en la zona norte del país, Guanacaste, y varios puntos de la Gran Área Metropolitana. Fotografía: Cortesía Schneider Electric.
Otra de las compañías que se sumaron a la migración de su flota fue Schneider Electric. Michael Ramírez, gerente de desarrollo de negocios de la compañía indicó que, este cambio que arrancó en 2019 les ha permitido reducir costos, ya que sus vehículos se utilizan en jornada laboral completa.
“El cambio completo y paulatino de la flotilla vehicular significará reducir las emisiones de CO2 en 50 toneladas anuales y es equivalente a sembrar más de 100 árboles. Compartir la visión de Costa Rica del Plan Nacional de Descarbonización es una ventaja competitiva porque responde a la integridad que promovemos como negocio responsable con el planeta”, destacó Ramírez.
Por su parte, Walmart, el año pasado sumó a su flotilla vehicular los primeros 33 autos eléctricos, los cuales pretenden generar un impacto en sus operaciones evitando en un año, el consumo de más 62.300 litros de gasolina y el equivalente a evitar más de 145 toneladas de gases de efecto invernadero.
“Nos hemos concentrado en buscar las opciones que nos ofrezcan la mejor combinación de calidad, desempeño por kilómetro, precio y costo de mantenimiento. La transformación hacia las formas de movilidad eléctrica es una prioridad que va alineada a nuestro compromiso de cero emisiones netas para 2040″, dijo Mariela Pacheco, Subgerente de Asuntos Corporativos de Walmart.
El relativo alto precio de los vehículos eléctricos en el país, suele ser la limitante de muchas personas y compañías para adquirir estos modelos, sin embargo según las fuentes consultadas por EF la inversión se recupera “rápidamente” por la gran cantidad de beneficios que genera migrar a estas soluciones.
Por ejemplo, el ahorro en combustible, mantenimiento y marchamo. Asimismo, el impulso del Gobierno al camino del carbono neutralidad, ha llevado a las diferentes entidades bancarias a establecer programas de financiamiento especial para incentivar la compra de vehículos 100% eléctricos.
Periodista de El Financiero y excolaboradora del proyecto #NoComaCuento de La Nación.
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