Una de las presentaciones usuales para degustar larvas y grillos es cubrirlas con chocolates. Estos son de Costa Rica come insectos. (Mayela Lopez)
La regulación del consumo de insectos es un cuello de botella para su comercialización, dentro y fuera del país. Si bien algunos de los principales mercados están en Asia, y los productores locales podrían buscar acercamientos, por ejemplo, con China por la vía del tratado de libre comercio vigente, otros destinos más accesibles, como el estadounidense, el mexicano, el francés o el belga han avanzado en las políticas para importación y consumo de insectos.
[ Un curso los acercó al mundo de los insectos y hoy venden barras de proteína de grillo ]
Estados Unidos ya se perfila como el mercado de mayor crecimiento durante los próximos cinco años, con un aumento anual promedio proyectado de 29,5%, sobre todo en insectos procesados enteros, alimentos para animales y polvo de insectos, tres áreas que ya se desarrollan formalmente en Costa Rica. (vea: En producción)
[ Hermanos abandonaron carreras en Miami y Brasil por un negocio de larvas de moscas en Guápiles ]
El principal freno en materia de leyes es local. Actualmente el Senasa otorga Certificado Veterinario de Operación (CVO) para:
Y los requisitos generales para obtenerlos son solicitud y declaración jurada, permiso de uso de suelo, título de propiedad o documento idóneo, factura de pago de la tarifa, documento de identidad o personería jurídica, sistema manejo de desechos y de tratamiento de aguas residuales y viabilidad ambiental.
“En el caso de que el establecimiento desee exportar sus productos debe registrarse ante la Dirección de Inocuidad de Productos de Origen Animal (Dipoa) para obtener el certificado de exportador según el procedimiento DIPOA-PG-001″, puntualizó Senasa, mediante su oficina de prensa.
Las medidas aún son poco conocidas entre emprendedores e inversionistas del sector, pues su aplicación durante el último cuatrimestre de 2021. Además, un estudio desarrollado por la Promotora de Comercio Exterior (Procomer) y publicado el 22 de abril de 2022 encontró que la legislación local es uno de los cuellos de botella que puede tener impacto alto para nuevos emprendimientos.
Gricket House prepara barras de proteína hechas con polvo de proteína de grillo. Estudios globales proyectan crecimiento sostenido para la categoría de barras de insectos comestibles en los próximos años. Foto: Cortesía de Gricket House
Enrique Ulloa, investigador a cargo del estudio de Procomer, señaló que algunas aplicaciones específicas de la ley aún están en desarrollo, sobre todo las etapas anteriores y posteriores al procesamiento. Por ejemplo, lo que corresponde al pie de cría, es decir, la especialización en reproducción de individuos para que sean criados y procesados por terceros. En este apartado de pendientes entran también los análisis de laboratorio y los requisitos de importación y exportación específicos para el sector.
“Algo que no se nos puede escapar es el tema de la asistencia técnica. Tampoco el pie de cría se puede dejar de lado ¿Cómo se puede obtener un pie de cría para evitar la sobreexplotación, o alguna enfermedad? A nivel nacional es uno de los cuellos de botella principales”, subrayó el especialista.
Procomer ha identificado los principales mercados y también las mayores oportunidades por insecto, por uso final o por tipo de producto. Pero advierte que se debe invertir con prudencia, pues una vez desarrollado el negocio, es la empresa la responsable de cumplir con la normativa comercial internacional, en temas como etiquetado, inocuidad y similares. (vea: A futuro)
“Tenemos oficinas de promoción comercial que pueden brindar seguimiento en la búsqueda de contactos comerciales, pero va a ser muy importante generar una oferta que cumpla con las condiciones de mercado. Para actividades de promoción vamos a necesitar que cumplan con eso”, subrayó Ulloa.
Para lograrlo, se requerirá también la aplicación de mejoras tecnológicas para el manejo de insectos que permita a las empresas pasar de la operación artesanal a contar con herramientas, por ejemplo, para la trazabilidad, escalamiento y estandarización de la producción.
Y el otro eje de acción necesario es la creación de una cultura de consumo local, que acompañe al crecimiento del negocio, refuerce su sentido de pertenencia y funcione como mercado complementario a la exportación.
Jéssica Montero es periodista de la sección de Negocios de El Financiero.
© 2022 Todos los derechos reservados, cualquier uso requiere autorización expresa y por escrito de Grupo Nación GN S.A.
© 2022 Todos los derechos reservados, cualquier uso requiere autorización expresa y por escrito de Grupo Nación GN S.A.
Miembro del Grupo de Diarios América (GDA)
