Cada día surgen nuevas noticias sobre el auge del emprendimiento en España y en Galicia. Datos que avalan el buen funcionamiento del colectivo de startups y sus buenas perspectivas de futuro.
En términos económicos, «emprender» es iniciar la búsqueda de generación de valor, a través de la creación o expansión de una actividad económica por medio de la identificación de nuevos productos, procesos o mercados.
El emprendimiento desarrolla nuevos negocios, permitiendo incrementos de productividad y generando un porcentaje importante de empleo que contribuye al aumento del valor agregado de la economía. La generación de estos nuevos negocios depende de todo un ecosistema integrado que recoge aspectos como las condiciones del mercado, el acceso a recursos financieros e información, así como la intervención de los gobiernos a través de programas y proyectos públicos que favorecen (en mayor o menor medida) la formación de ambientes de negocios propicios para que los emprendedores lleven a cabo sus iniciativas y obtengan beneficios.
En este sentido, el Gobierno de España aprobó el pasado mes de diciembre el Anteproyecto de Ley del ecosistema de las empresas emergentes, más conocida como «Ley startups», que amplía las deducciones fiscales sobre los planes de acciones o la inversión siguiendo las reclamaciones del sector. Se prevé que estas nuevas medidas entren en vigor en el verano de 2022.
Esta nueva ley, que aspira a dinamizar la creación de empresas emergentes, surge en un contexto alcista del ecosistema emprendedor, puesto que, siguiendo un reciente informe, el 2021 resultó ser un año histórico en el que se ha dado un paso adelante sin precedentes: las startups españolas cerraron más de 400 operaciones de inversión captando más de 4.200 millones de euros, una cifra que casi multiplica por cuatro el volumen de 2020.
Este auge del emprendimiento se replica, sin duda, en Galicia, donde ya existe un colectivo consolidado de nuevas empresas con grandes perspectivas de futuro y apoyado por todos los agentes del sistema de innovación (aceleradoras, clusters, centros tecnológicos, universidades, etc.) lo que permite mejorar la competitividad y crecimiento de las compañías.
Galicia sigue siendo un importante nicho de creación empresarial. También Vigo resulta muy atractiva para la puesta en marcha de nuevos negocios, puesto que según los datos de emprendimiento del año pasado, recopilados por el Instituto Gallego de Estadística, en 2021 en la ciudad se registraron oficialmente 596 nuevas sociedades, lo que significa que de promedio se abrieron 50 nuevas firmas cada mes. No había un volumen de emprendimiento tan elevado en la urbe olívica desde 2018. Ni siquiera en 2019, antes de la pandemia, se habían creado tantas empresas.
En esta misma sintonía, la prestigiosa revista británica Monocle, especializada en estilos de vida y asuntos internacionales, define a Vigo como una ciudad startup y con gran potencial. Concretamente apunta a la ciudad olívica como un lugar ideal para emprender gracias a su perspectiva internacional y sus buenas comunicaciones, señalando especialmente el puerto.
No podemos olvidarnos que en Galicia existen numerosas iniciativas de apoyo al emprendimiento que han impulsado todos los buenos resultados cosechados hasta la fecha. Una de ellas, sin dudas, es la aceleradora vertical de la industria de automoción Business Factory Auto (BFA).
La iniciativa BFA, promovida en el año 2016 por la Xunta de Galicia, como pionera en el proceso de innovación abierta que están incorporando los principales polos industriales a nivel mundial; liderada por la industria (CEAGA y Grupo Stellantis), y respaldada por el Consorcio de la Zona Franca de Vigo, constituye un ejemplo de buen funcionamiento de colaboración público-privada. Impulsa la aceleración y consolidación de proyectos especializados en automoción para transformarlos en empresas innovadoras que contribuyan a cubrir huecos en la cadena de valor y fortalecer la industria gallega de automoción.
El Business Factory Auto acaba de iniciar una nueva etapa, puesto que ya está en marcha la sexta edición, desde el pasado 15 de diciembre, con la participación de 20 nuevos proyectos innovadores, diez en la fase de aceleración y otros tantos en la de consolidación. 20 nuevas startups que se suman a las 53 empresas de ámbito 4.0 que ya ha generado la iniciativa y que seguirán incrementando la innovación, la digitalización y el buen saber hacer en una de las industrias clave de nuestra comunidad, el sector de automoción.