América del Norte aporta 28% del PIB global, representa un bloque económico 50% mayor que China y 55% mayor que la Unión Europea. (Cuartoscuro)
La Cumbre de Líderes de América del Norte, que reúne a los gobernantes de México, Estados Unidos y Canadá no ofrece oportunidades reales de negocios, e inversiones y, hasta ahora, reinan los discursos.
La especialista en Economía de la Escuela Bancaria y Comercial (EBC), Verónica Zepeda Vargas, señaló a Publimetro que, bajo tales términos la cumbre está reprobada y sus acuerdos “merecen cuatro de calificación”.
Explicó que no hay oportunidades reales de negocios, porque el gobierno mexicano –encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador– no ofrece certeza a las inversiones, a través del cumplimiento al Estado de derecho, respaldo a los contratos firmados y mayor seguridad.
Además, apuntó, la administración de la 4T no respeta los acuerdos suscritos en el T-MEC y, con ello, abre la puerta a la incertidumbre o controversias legales, como la que inició Estados Unidos en contra de la política energética de México, que afecta a inversionistas extranjeros y relega la generación de energías limpias.
“No creo que existan oportunidades reales para generar negocios porque actualmente México muestra cierta resistencia en los acuerdos que se tomaron en el T-MEC y, si no se cumplen, no podrán materializarse en hechos reales” apuntó.
La especialista de la EBC señaló que el objetivo de la Cumbre de Líderes de América del Norte no es solicitar dinero o apoyos económicos, para el desarrollo de Latinoamérica, como lo solicitó el presidente Andrés Manuel López Obrador a su homólogo de EU, Joe Biden.
Refirió que el gobierno mexicano solo busca beneficios, pero se olvida que ello implica responsabilidades y obligaciones que la administración Biden exigirá a cambio, cuyas consecuencias no benefician a México.
“El hecho de estirar la mano y recibir recursos nos obliga a cumplir con las políticas adoptadas por el gobierno de EU, sobre todo en materia de migración, trayendo problemas económicos y sociales para los estados del norte de nuestro país.
“El objetivo de la cumbre es tomar acuerdos en los temas que representan un obstáculo para la integración de la región; y solo en caso de ser necesario, los gobiernos únicamente deben plantear la aportación de recursos para implementar y cumplir con los acuerdos suscritos”, refirió.
“En reunión con empresarios de México, EU y Canadá, la secretaria de Economía, Raquel Buenrostro comentó la importancia de fortalecer la región de América del Norte, sustituyendo importaciones de Asia con producción regional, para lograr un desarrollo justo, equitativo e incluyente”.
El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) presentó un plan estratégico para reforzar la integración de América del Norte y lograr que se convierta en la región más competitiva del planeta; la cual consta de cuatro pilares:
México, EU y Canadá deben mostrar un compromiso creíble con las obligaciones asumidas en el T-MEC, y procurar el Estado de derecho y la certidumbre jurídica necesaria para la atracción de inversión; ese compromiso debe ser claro en las acciones, las regulaciones y la legislación de las tres partes.
Como parte de tales acciones, los gobiernos de López Obrador y Biden deben resolver las disputas generadas entorno a la política energética mexicana y la interpretación estadounidense de las reglas de origen para el sector automotriz.
Hay que invertir en la generación de electricidad con baja huella de carbono, así como en el desarrollo de gasoductos que permitan un mayor uso de gas natural como combustible de transición.
En el tema de la movilidad eléctrica, los tres países deben utilizar las disposiciones del T-MEC, no solo para incentivar la producción de vehículos eléctricos, sino para implementar medidas concretas que incentiven la venta de tales autos.
El 70% del comercio entre México y sus socios de América del Norte se realiza por carretera, lo que exige la inversión y construcción de infraestructura que permita cruces transfronterizos eficientes: carreteras, puentes internacionales, banda ancha, vías férreas y transporte multimodal.
Es urgente crear despachos conjuntos en las aduanas. En el pasado se estableció el Programa de Despacho Aduanero Conjunto entre México y EU; en éste las autoridades aduaneras de ambos países realizan inspecciones en un mismo sitio, lo que reduce tiempos y costos.
Desarrollar programas para el desarrollo del talento y facilitar la creación de una fuerza laboral trilateral traería beneficios para los tres países; con flujo constante de mano de obra para las economías estadounidense y canadiense, y mayores oportunidades para la población mexicana.
Asimismo se debe expandir la lista de profesiones del Capítulo 11 del T-MEC, sobre la entrada temporal de personas de negocios, para facilitar la movilidad laboral en áreas donde los países reportan un déficit de oferta, que se complemente con la mano de obra de sus socios de la región.
Los reportes oficiales destacan que el bloque de América del Norte representa:
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