'Chito' Vera emprende con Jugos Pepa en Ecuador – El Comercio (Ecuador)

Marlon Vera emprende con sus dos hermanos en la venta de jugos de frutas. Foto: Cortesía Jugos Pepa
Tres profesionales trabajan para que los jugos que se preparaban en su casa en Chone estén en las mesas de los ecuatorianos.
Esos recuerdos de su niñez, con sabor a hogar, se convirtieron en un producto y en el emprendimiento de los hermanos Pierina, Marlon Humberto y Marlon ‘Chito’ Vera.
Jugos Pepa es la marca de sus bebidas, que se elaboran desde hace dos años en Guayaquil, dice Pierina Vera, gerenta general de Frutix Ecuador, su pequeña empresa.
Los jugos se procesan con cuatro tipos de frutas: guanábana, maracuyá, limón y uno de guanábana con pitahaya. A mediados de este año se tiene previsto lanzar una quinta bebida: de coco.
Las bebidas son jugos naturales, que contienen fruta, agua y azúcar, sin químicos, asegura. ‘Chito’ agrega que “es tan natural como tomarte la fruta, directamente”.
El deportista de la UFC comenta que en el mercado existen múltiples bebidas; sin embargo había un nicho que estaba desatendido. Sus jugos son la respuesta para esos clientes, que quieren un producto fresco y natural.
​Pierina describe cómo son sus Jugos Pepa, un nombre que nació de una palabra que se usa cotidianamente en Chone. Pepa representa confianza y optimismo, pero también es una expresión coloquial para describir a alguien musculoso y pepudo, como ‘Chito’, explica graciosamente.
Esa añoranza por su tierra y el campo influyó para emprender en este negocio. También, los animó esa dura realidad que viven los agricultores cuando sus frutas se pudren y se desperdician por falta de compradores, o que se pierden en las inundaciones en invierno.
Su objetivo era dar valor agregado y comprar esa producción a los campesinos, “pagando un precio justo”, manifiesta Pierina.
Con esa idea adquirieron una fábrica, que se dedicaba al procesamiento de frutas.
Toda la materia prima es adquirida a los agricultores de Chone (Manabí), Playas (Guayas) y El Azúcar (Santa Elena). En el caso del limón, la familia Vera tiene sus plantaciones en Pedro Carbo.
Antes de comenzar se asesoraron con nutricionistas para seleccionar frutas exóticas, con buen contenido nutricional y sabor.
En febrero del 2020 estaban listos para sacar sus primeras botellas al mercado y llegó el covid. Al siguiente mes debieron cerrar y recién a mediados de ese año reanudaron sus actividades.
Debían hacer funcionar la fábrica, porque se endeudaron en un préstamo con dos entidades financieras para hacer su inversión. En ese primer año apenas vendieron 15 000 botellas. Los Vera están esperanzados en recuperarse este año con una producción de 500 000 botellas.
También, tienen proyecciones para crecer con otra línea de productos, como pulpa de fruta sin azúcar añadida para un nicho específico de personas que llevan una vida fitness, cuenta Pierina.
La elaboración de dulces choneros, como hay en toda casa de ese cantón, es otro plan, que está proyectado para septiembre.
Tienen un plan más ambicioso: exportar. Para ello están en la exploración de esos mercados. Por lo pronto, cuentan con la certificación de Buenas Prácticas de Manufactura y se preparan para obtener más certificaciones.
En el país, su principal mercado es Guayaquil, donde funciona la fábrica que compraron antes de la pandemia. Pero la comercialización se realiza en 80 puntos a escala nacional. Su canal más importante es la red de Tía en todo el país, con los jugos de guanábana y guanábana con pitahaya.
Otros son Mi Comisariato de Guayaquil, Durán y Samborondón, las Tiendas Listo, Tiendas Bro y Tiendas Altoque; Pharmacy’s y supermercados El Portal de Guayaquil. Están en negociación para entrar en dos supermercados grandes en esa ciudad. En Quito, Jugos Pepa está en el restaurante Súper Manabita.
El objetivo, según Pierina, es colocar su producción en las perchas de grandes cadenas de supermercados, como Supermaxi y Megamaxi, Santa María y El Coral, para tener cobertura nacional.
Su hermano ‘Chito’ quiere que todos los ecuatorianos prueben sus jugos, porque además de refrescantes y saludables, son hechos por “una familia luchadora, con disciplina y apasionados por lo que queremos lograr”, como él.
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