La compañía de fabricación de autos eléctricos Tesla sufre retrasos en su operación por el cierre obligado de su planta en Shanghái, China, debido a las restricciones impuestas por las autoridades para contener el nuevo brote de COVID en el país.
Tesla originalmente contemplaba una pausa de solo cuatro días cuando se anunció el cierre el 28 de marzo, pero no pudieron reanudar operaciones ni viernes ni sábado tras la ampliación de las restricciones de movimiento en la mitad este de la ciudad. Prácticamente todas las áreas de Shanghái están en confinamiento.
Inicialmente, la empresa dirigida por Elon Musk había informado a los trabajadores y proveedores que la producción en su planta se reanudaría el lunes como esperaba, pero un nuevo aviso interno habría descartado esa posibilidad de acuerdo a un informe de la agencia Reuters.
El cierre actual marca uno de los tiempos de inactividad más largos desde que la planta de Tesla comenzó a producir a fines de 2019.
En su fábrica de Shangái, Tesla produce cada semana unos 6 mil autos Model 3 y hasta 10 mil Model Y.
Hasta ahora no se sabe cuándo podrían reiniciar actividades y no hay comunicado oficial por parte de la empresa.
“Este ha sido un trimestre excepcionalmente difícil debido a las interrupciones en la cadena de suministro y la política de China libre de COVID”, dijo el director ejecutivo Elon Musk en un tuit el sábado.
