Los fondos estadounidenses dijeron que formaron una empresa conjunta con una rama de Inelectra Group, con sede en Caracas, para llevar a cabo proyectos de exploración y producción de petróleo y gas en el país sudamericano que sigue sancionado por Estados Unidos.
Las empresas norteamericanas tienen prohibido hacer negocios con la estatal petrolera venezolana PDVSA, una política que comenzó en 2019 con la administración de Donald Trump y ha seguido hasta la actualidad.
Dos fondos de inversión estadounidenses dijeron este martes que formaron una empresa conjunta con una firma venezolana para llevar a cabo proyectos de exploración y producción de petróleo y gas en el país sudamericano sancionado por Estados Unidos.
Gramercy Funds Management y Atmos Global Energy dijeron que su empresa conjunta trabajaría con una rama de Inelectra Group, una firma con sede en Caracas que tiene una participación en el proyecto petrolero Golfo de Paria Este frente a la costa este de Venezuela, donde se encontró petróleo en 2001.
Las empresas estadounidenses tienen prohibido hacer negocios con la estatal petrolera venezolana PDVSA, una política que comenzó en 2019 con la administración de Donald Trump y ha seguido con el presidente estadounidense Joe Biden.
Las fondos no revelaron el monto de la inversión en la empresa petrolera. Los portavoces no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios.
Cualquier esfuerzo está sujeto a la aprobación de Estados Unidos y Venezuela, dijeron las empresas.
Ali Moshiri, ejecutivo estadounidense y exjefe de operaciones latinoamericanas de Chevron Corp, creó un fondo de inversión en 2019 para emprender proyectos energéticos en Venezuela. Los socios buscan «contribuir a equilibrar la oferta y la demanda de petróleo», dijo en un comunicado.
El esfuerzo en el sector petrolero «será beneficioso para los intereses de Estados Unidos en la región y la economía de Estados Unidos al reducir los precios del combustible para los consumidores estadounidenses», dijo Matt Maloney, socio del inversionista de mercados emergentes Gramercy con sede en Connecticut en el comunicado.
Desde mediados del pasado año, fondos privados han buscado invertir en empresas venezolanas de diversos sectores ante una expectativa de revisión de las sanciones estadounidenses.
La divisa colombiana incorporaba la incertidumbre por algunas declaraciones del equipo de gobierno del presidente electo, el izquierdista Gustavo Petro, de su intención de acabar con la Procuraduría General de la Nación y de hacer bruscos cambios en el sistema de salud y en la actividad petrolera, que podrían afectar decisiones de inversión.
El peso colombiano se depreció un 0,95% a un nuevo mínimo cierre récord de 4.395 unidades por dólar | Reuters
Bogotá. Los mercados de América Latina cerraron en su mayoría con alzas aprovechando una estabilización del dólar a nivel global, mientras el peso colombiano acentuó la tendencia bajista por factores locales, aunque los inversores negociaron con cautela porque los factores de incertidumbre persisten.
«Ayer fue tanta la pérdida en los mercados que hoy arrancamos con algo de corrección, sin embargo el problema de fondo sigue latente y es el tema de recesión en Estados Unidos», dijo Camilo Pérez, economista jefe del Banco de Bogotá.
A ello se sumó una fuerte recuperación de los precios del petróleo -generador clave de divisas para algunos países de la región-, tras las fuertes pérdidas en las dos sesiones anteriores, debido a que los inversores volvieron a centrar su atención en la escasa oferta cuando persiste el temor a una recesión mundial.
La excepción se dio en el peso colombiano, que se depreció un 0,95% a un nuevo mínimo cierre récord de 4.395 unidades por dólar; mientras que el índice referencial de la bolsa, el MSCI COLCAP subió un 1,03% a 1.350,26 puntos.
La divisa colombiana incorporaba la incertidumbre por algunas declaraciones del equipo de gobierno del presidente electo, el izquierdista Gustavo Petro, de su intención de acabar con la Procuraduría General de la Nación y de hacer bruscos cambios en el sistema de salud y en la actividad petrolera, que podrían afectar decisiones de inversión.
«Son anuncios que pueden ser leídos como una ruta de gobierno más radical y pueden terminar afectando a los agentes colombianos», dijo Pérez del Banco de Bogotá.
Por su lado, el peso chileno borró las pérdidas iniciales y cerró con un repunte de un 2,11%, a 948,50/948,80 unidades por dólar, impulsado por un mejorado panorama global y una fuerte alza en el precio del cobre, la principal exportación del país, tras alcanzar en la víspera un valor de cierre mínimo histórico.
El índice líder de la Bolsa de Comercio de Santiago, el IPSA subió un 1,93%, a 5.103,39 puntos.
No obstante, la incertidumbre política en el país austral se mantiene de cara al próximo plebiscito en que se votará una nueva constitución, lo que se ha traducido en una fuga de capitales por parte de agentes externos y también algunos locales, dijeron operadores.
El real de Brasil, se fortaleció un 1,5% y el índice de acciones Bovespa repuntó un 2,15% a 100.846,20 puntos.
En México, el peso subió un 0,69% a 20,5100 unidades por dólar, aunque el referencial índice bursátil S&P/BMV IPC perdió un 0,75%.
La moneda peruana, el sol, ganó un 0,10% a 3,889/3,891 unidades por dólar. En tanto, el referencial de la Bolsa de Lima sumaba un 2,62%, a 485,73 puntos.
El peso interbancario argentino se depreció un regulado 0,13%, a 126,55/126,56 por dólar gracias a la intervención constante del banco central para regular la liquidez de la plaza.
Por su parte, el índice accionario S&P Merval se disparó un inusual 7,56%, a 102.265,41 puntos como cierre provisorio frente a coberturas selectivas por la coyuntura adversa doméstica.
Los requisitos, que de aprobarse serían los primeros en el mundo, fueron propuestos originalmente por el comité ejecutivo europeo el año pasado para reducir el impacto climático del sector de la aviación, considerado responsable de hasta el 3% de las emisiones globales.
Según el texto aprobado, los proveedores deberán mezclar un mínimo del 2% de combustible de aviación sostenible (SAF) en queroseno a partir de 2025 | Reuters
Bruselas. El Parlamento Europeo apoyó el jueves reglas históricas sobre combustible de aviación que establecen objetivos obligatorios para reemplazar el queroseno con fuentes de energía menos contaminantes, pero amplió la definición de lo que podría ser un combustible «verde».
Los requisitos, que de aprobarse serían los primeros en el mundo, fueron propuestos originalmente por el comité ejecutivo europeo el año pasado para reducir el impacto climático del sector de la aviación, considerado responsable de hasta el 3% de las emisiones globales.
Según el texto aprobado, los proveedores deberán mezclar un mínimo del 2% de combustible de aviación sostenible (SAF) en queroseno a partir de 2025, aumentando al 85% para 2050, más ambicioso que el objetivo de 63% para 2050 propuesto originalmente por la Comisión .
Según la propuesta original de la Comisión, el SAF incluiría biocombustibles obtenidos a partir de residuos reciclados y, en menor medida, combustibles sintéticos a base de hidrógeno o combustibles producidos a partir de fuentes de energía renovables.
Pero la versión de las reglas aprobada por el Parlamento Europeo amplió la definición original de SAF de la Comisión, agregando combustibles de carbón reciclado producidos a partir de gases de procesamiento de desechos y biocombustibles producidos a partir de grasas animales o destilados.
Antes de la votación, el comisionado de energía de la UE, Kadri Simson, instó a los legisladores a no ampliar la definición de SAF y a tener cuidado con los objetivos demasiado ambiciosos.
Los parlamentarios lograron enmendar el texto en el último minuto para excluir el uso de cultivos alimentarios y aceite de palma como SAF, lo que se habría permitido en circunstancias excepcionales en el texto preparado inicialmente por el Parlamento.
Las reglas ahora se presentarán para su aprobación por parte de los gobiernos miembros y la Comisión de la Unión Europea.
