Tu negocio puede darte más si sigues estos pasos.Pexels.
Cuando decidí comenzar un negocio con el objetivo de dejar mi trabajo en última instancia, me hice una promesa: iba a hacer que valiera la pena.
De lo contrario, habría dejado la carrera por la que había laborado toda mi vida, por nada.
Afortunadamente, la decisión valió la pena. En menos de un año, construí mi negocio a más de un millón de dólares en ventas y desde entonces, he seguido creciendo año tras año.
«Constrúyelo y vendrán» puede suceder en las películas, pero definitivamente no es la manera de crear un negocio exitoso.
Un error común que cometen muchos nuevos empresarios es configurar un sitio web magnífico, sentarse y esperar a que los clientes acudan a ellos.
Dado que hay más de 1,000 millones de páginas web en internet, esas son algunas probabilidades difíciles. Entonces, en lugar de esperar, salí y encontré a mis clientes.
Mi primer negocio en línea fue hacer consultoría de publicidad digital para dueños de negocios usando las habilidades de mi trabajo.
Al preguntar a los propietarios de pequeñas empresas donde pasaban su tiempo en línea, me di cuenta de que mis clientes potenciales estaban en grupos de Facebook.
El foro puede cambiar con el tiempo, pero el principio es el mismo. A lo largo de los años, ayudé a los estudiantes a encontrar a sus clientes en internet, incluso en Reddit, Instagram, YouTube, podcasts, foros específicos de la industria y más.
Dentro de esos grupos, busqué términos de los que probablemente hablarían mis clientes ideales, como «anuncios» y «campañas».
La mayoría de las veces, hacían preguntas sobre las cosas en las que podía ayudar, así que respondí a sus dudas, de manera gratuita y sin esperar nada a cambio.
No sabía exactamente cómo se traduciría eso en conseguir clientes, pero sabía que si lideraba dando valor, al menos comenzaría a construir mi reputación en línea.
Además, pensé que tenía que haber algunas personas que querrían más ayuda de la que yo podía brindar a través de mis respuestas gratuitas.
Cuando pedí algo a cambio, fueron simplemente unos minutos de su tiempo para hacer algunas preguntas de investigación de mercado, como «¿Con qué estás luchando?» y «¿Con qué requieres ayuda?» para poder entender lo que podría eventualmente vender.
Mantuve una lista actualizada de unos 10 grupos de Facebook y respondí todas las preguntas que pude encontrar cada día. Y así fue como conseguí mi primer cliente.
Después de asistir a una llamada de investigación de mercado, le agradecí respondiendo algunas preguntas que tenía sobre publicidad.
Posteriormente, continuó enviándome preguntas de seguimiento por correo electrónico, las cuales respondí. Después de aproximadamente dos semanas de esto, me envió un correo electrónico haciéndome saber cuánto apreciaba lo que ya le había ayudado, de manera gratuita y me preguntó cómo podía contratarme para obtener resultados aún mejores.
No podía creerlo cuando vi su primer pago a través de Paypal. ¡Estaba en el negocio! Después de ver lo bien que había funcionado, continué haciéndolo hasta que obtuve mis primeros clientes.
Quiero aclarar que el proceso no fue fácil. Debo haber hablado con más de 50 personas de esta manera para conseguir esos clientes. La mayoría de las veces, me decían que era demasiado caro, a pesar de que estaba cobrando la misma tarifa que mi salario.
Fue increíblemente desalentador, y estuve tentado a rendirme. Sin embargo, cada vez, me recordaba a mí misma que los empresarios exitosos ven el rechazo como un «trampolín» y yo también necesitaba hacer eso si realmente quería construir mi negocio.
Si bien había sido la mejor manera de comenzar mi negocio y reemplazar mi salario, vender coaching/consultoría esencialmente limitó seriamente mi potencial comercial porque dependía únicamente de mi tiempo y energía limitados.
Es por eso que después de trabajar con alrededor de 20 clientes, tomé todo lo que había aprendido sobre cómo ayudar a la gente a obtener los mejores resultados y lo incorporé a mi primer curso digital.
Nota: esto fue después de que hice la transición para ayudar a otros a construir sus propios negocios en línea después de que varias personas me preguntaron si los ayudaría a hacer lo que había hecho con mi negocio de consultoría de publicidad digital.
Si bien pude crear un gran curso la primera vez y obtener buenos testimonios debido a mi experiencia trabajando con clientes, no estaba satisfecha. Quería crear el mejor curso de este tipo en el mercado.
Así que pasé tres años perfeccionándolo. Eso no significaba que me sentara frente a una computadora y trabajara sola.
No, hice que cientos de estudiantes pasaran por el curso. Cada vez que un estudiante tenía una pregunta o sentía que algo en el curso no estaba claro, regresaba y actualizaba ese contenido.
Fue mucho trabajo y podría haberme ahorrado algunos años si hubiera estado dispuesta a conformarme con crear un buen material en lugar de uno excelente. Pero no lo hice.
Sin embargo, el resultado es algo de lo que realmente puedo estar orgulloso. No solo eso, sino que el trabajo valió la pena. Ahora tengo cientos de testimonios de mi curso insignia y es ampliamente considerado como el mejor de su clase.
Tan pronto como recibí los primeros testimonios de mis clientes y confirmé que estaba haciendo un gran trabajo para mis clientes, comencé a probar caminos de escalar mi negocio lo más rápido posible.
Sabía que la clave era estar frente a más personas, lo que tradicionalmente puede ser un proceso muy lento. Pero los anuncios de Facebook me ayudaron. Una vez más, mi experiencia en publicidad fue útil.
Para el lanzamiento de mi primer curso, invertí alrededor de 1,500 dólares en publicidad. Como resultado, gané 8,000 dólares en ventas.
Eso me permitió recopilar suficientes datos para confirmar que ejecutar publicidad paga sería rentable y me dio una idea de cuánto probablemente redundaría en ventas cada dólar gastado en publicidad.
Armado con esa información, invertí alrededor de 10,000 dólares unos meses más tarde para el lanzamiento de mi segundo curso. Como resultado, ese lanzamiento generó 100,000 dólares en ventas.
Los resultados del primer lanzamiento podrían haber sido una casualidad, pero el segundo lanzamiento confirmó que había acertado con mis estrategias de publicidad, marketing y ventas.
Después de dos lanzamientos exitosos, estaba lista para escalar aún más. Para mi tercer lanzamiento, invertí aproximadamente 80,000 dólares y terminé cerrando ventas en alrededor de 800,000 dólares.
Una vez más, no fue fácil.
Cada vez, fue increíblemente aterrador hacer esas inversiones mientras me preguntaba si este sería el momento en que algo se «rompería» y terminaría en números rojos.
Además, cada lanzamiento supuso mucha labor, lo que implicó largos días hablando con clientes potenciales y largas noches con mis equipos de operaciones y atención para asegurarme de que todo funcionara sin problemas.
Sin este paso, ninguno de los otros habría importado. Porque no importa en qué industria se encuentre, en última instancia, es un mundo pequeño.
Se corre la voz si estás haciendo un buen trabajo. Y se propaga aún más si es malo.
Dado lo competitiva que era mi industria y la cantidad de jugadores establecidos que había, sabía que tenía que ir más allá para mis clientes si quería destacarme.
Por ejemplo, para mi primera llamada con un cliente, aunque sabía lo que hacía, quería asegurarme de que todo saliera bien. Así que pasé más de tres horas escribiendo cada palabra que diría durante una hora. Y lo hice de nuevo para la segunda.
Una vez que comencé a vender cursos, continué esforzándome en exceso. Estaba tratando con cientos de clientes, lo que significaba pasar varias horas todos los días respondiendo las preguntas de mis alumnos para ayudarlos a obtener los mejores resultados posibles.
Hacer esto significó que trabajé mucho más que mis competidores, pero valió la pena a través de un cúmulo de testimonios y clientes muy felices.
Como puedes ver, nada de este proceso fue fácil. Sin embargo, lo que me he dado cuenta a través de mi propio viaje empresarial y desde entonces he ayudado a miles de personas a construir sus propios negocios en línea es que es un sueño que cualquiera puede lograr… si estás dispuesto a hacer el trabajo.
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