Siempre se ha dicho que el sector de la aviación no es el más indicado para invertir. Las líneas aéreas pueden generar cuantiosos ingresos durante un ejercicio y al siguiente, debido a múltiples factores, experimentar pérdidas de infarto.
Estas variables son muy diversas, incluyendo huelgas, accidentes, atentados, competitividad extrema en los precios (sobre todo tras la llegada de las compañías low cost). Basta comprobar casos como el de Iberia, que apenas generó ingresos en la primera década de este siglo.
¿Entonces no es rentable invertir en aviación? Como ha ocurrido con otros sectores vinculados al turismo, las compañías que no han desaparecido tras la pandemia tienen bastante potencial de crecimiento.
Habría que valorar como podrían impactar en las finanzas de las aerolíneas algunas medidas actuales, como las nuevas tarifas de Aena en España asociadas al “coste Covid”. En cualquier caso, la movilidad ha aumentado significativamente tras la relajación de las limitaciones impuestas en 2020.
Si integramos las aerolíneas dentro del sector turístico en general, hay muchas opciones rentables para invertir. La cuestión es encontrar el producto adecuado: índices, acciones, fondos cotizados e incluso contratos por diferencia.
Los datos sobre la rentabilidad de las aerolíneas no terminan de cuadrar. La agencia EFE publicó el mes pasado que las compañías aéreas prevén menos ingresos de los esperados, pero en mayo se hablaba en los medios del primer año de rentabilidad para las líneas aéreas tras la pandemia.
Iberia, Lufthansa, IAG, British Airways, Vueling y Air France son algunas de las compañías que mostraron informes positivos en el segundo trimestre de 2022. Cabe destacar que estos datos “positivos” reflejan un descenso en las pérdidas que podrían indicar una recuperación durante el año.
Las previsiones tras un primer trimestre relativamente bueno no contaban con el estallido de la guerra abierta en Ucrania. El encarecimiento del combustible es uno de los factores que podrían frenar el crecimiento de las compañías aéreas que, en pleno verano, ya hablan de un 16% menos de ingresos en contraste con las previsiones de hace unos meses.
Si las aerolíneas no terminan de cuajar, siempre quedarán otras alternativas de inversión en el sector turístico. Algunos expertos aconsejan invertir en acciones de compañías hoteleras, empresas de cruceros y agencias de viajes. No son pocas las empresas que han sobrevivido a la pandemia y alcanzado el verano de 2022 con buenos datos. De todas formas, no es lo mismo invertir de la forma tradicional en Bolsa que hacerlo a través de CFDs con un bróker online, con características y riesgos diferentes a los de la especulación clásica, por ejemplo los efectos del apalancamiento es algo que habrá que conocer en profundidad.
Existe la opción de invertir directamente en compañías. Entre las acciones más populares se encuentran las de Meliá, MSC y eDreams (para invertir en hostelería, cruceros y agencias de viajes, respectivamente). Son solo algunos ejemplos, hay muchas más empresas donde invertir.
Quizá hay demasiadas. Por eso, muchos minoristas suelen recurrir a fondos especializados en el sector turístico. GVC Gaesco 300 Places Worldwide es uno de los más conocidos. Invierte en compañías relevantes en el sector, como Meliá o Booking, teniendo en cuenta el índice Stoxx Global 1800 Travel & Leisure.
Este índice, además de ser una referencia en términos de rentabilidad, es accesible a través de fondos cotizados. Otros ETF similares son Invesco European Travel Sector y Lyxor STOXX Europe 600 Travel & Leisure.
Otrso fondos en los que invertir están relacionados indirectamente con el consumo dentro del sector turístico. NN (L) Food & Beverages es un fondo que suele ponerse como ejemplo, ya que invierte en empresas vinculadas a la industria alimentaria.
Existen otras áreas vinculadas a la aviación que, en principio, no parecen atractivas. Algunas opciones son la formación de pilotos o la carga aérea. En el primer caso, se trata de aprovechar la creciente demanda de pilotos a nivel mundial tras la reactivación del sector. Uno de los nichos más interesantes es el de las tecnológicas dedicadas a la simulación.
En cuanto a la carga aérea, los datos indican que existe una tendencia al alza en la demanda observada a finales de 2021. En este caso, aunque el vínculo con la inversión en aviación es directo, es cierto que la inversión queda bastante lejos del sector turístico propiamente dicho. Se relaciona con él a través del transporte de productos de consumo.
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