El Consorcio de la Zona Franca de Vigo aprobó ayer sus presupuestos para 2023, los cuales contemplan una inversión de 74 millones de euros, además de una previsión plurianual que asciende a 276 millones. Con estas cantidades Zona Franca quiere afrontar las inversiones para el futuro económico más inmediato de Vigo y su área de influencia.
Estos presupuestos incluyen inversiones en infraestructuras y servicios para empresas, potenciación de nuevos negocios y del comercio internacional y actuaciones urbanas propuestas por el delegado del Estado, David Regades. “Ayudarán al fortalecimiento de la economía y la creación de empleo, para apuntalar el necesario crecimiento en un entorno internacional complejo. Para ello contemplamos la ampliación de suelo industrial, tan necesario para el área de Vigo, así como proyectos que beneficiarán tanto a los sectores básicos de la economía de la zona, como a los nuevos proyectos y emprendedores”, explicó en un comunicado Regades.
Entre las principales partidas de los presupuestos del próximo ejercicio destacan los 10,3 millones de euros destinados a la ampliación del Parque Tecnológico y Logístico (PTL), los 6,6 millones dedicados a mejoras en el polígono de Balaídos o los 2,9 millones para mejoras en el polígono de Bouzas.
En otras actuaciones para fortalecer los sectores del área de Vigo, los presupuestos contemplan una partida de 12,2 millones para la construcción del edificio del World Car Center. Entre las novedades está medio millón de euros asignado para poner en marcha un nuevo centro de negocios de Redondela. Asimismo, las cuentas incluyen el aparcamiento de camiones de la VG-20. En las intervenciones urbanas destacan las obras del edificio de la calle Real para la sede de Down Vigo, con 1,2 millones, así como las obras de conversión del aparcamiento robotizado en uno convencional en la zona del Náutico.
Los presupuestos aprobados ayer por Zona Franca incluyen también una partida de 10,1 millones para el proyecto del Polígono de A Pasaxe, en Gondomar. Este anuncio llega menos de dos semanas después de que la asociación de empresas instaladas en este parque industrial reclamaran a la Xunta y el Concello que desbloquearan los trámites administrativos que impiden regularizar la situación del polígono.
Sin embargo, ambas administraciones afirmaron que estos trámites no impiden el desarrollo del proyecto del polígono que correspondería al Concello de Gondomar y a la Zona Franca, que con esta partida presupuestaria plantea iniciar este proceso.
Los empresarios aseguraron que la situación del polígono dificulta la consecución de contratos internacionales e incluso programas de apoyos públicos y complica el crecimiento.
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