Adriana Durán Favela, es una joven lagunera que a la par de ser maestra, ha dedicado los últimos años a recorrer el camino hacia un mundo incluyente, a través de la Lengua de Señas Mexicana (LSM).
Ibero, Grupo Lala, Club Santos y los tres ordenes de gobierno son algunas instituciones que se han apoyado en Adriana como intérprete para ofrecer un mensaje incluyente y respetuoso para las personas con discapacidad auditiva.
Además, Adriana ha estado presente en informes de gobierno, spots empresariales y recientemente en la marcha del Día internacional de la mujer.
Años de compromiso y de continuo aprendizaje, la han posicionado como intérprete en La Laguna, además de contar con el respaldo de la comunidad sorda de la región, en especial, su hermano César Durán.
Conoce más de la trayectoria de Adriana, quien además ha sido impulsora de la importancia de aprender Lengua de Señas Mexicanas como un herramienta de inclusión, que debe ser impartida únicamente por maestros sordos.
“Yo aprendí señas porque tengo un hermano que es sordo (César). Pero sabía únicamente las señas caseras, hasta hace cuatro años empecé a aprender bien la Lengua de Señas Mexicanas”.
“Las señas caseras son todas las que se hacen en las familias. Es como más mímico de acuerdo a como lo vayan implementando en cada familia, una seña para mesa, para casa, etc.”
“Mi hermano siempre ha estado en la escuela para personas sordas desde que él adquirió la sordera, él es cinco años mayor entonces desde que nací la lengua de señas ya era muy normal en mi casa y ya la dominaban mis papás”.
En cuanto a la Lengua de Señas Mexicanas, es una lengua que abarca todo México, cambian únicamente regionalismos o ciertas palabras de acuerdo a la región. Esta la ha estado estudiando Adriana desde hace cuatro años.
“Empecé a interpretar por obligación porque el contexto me lo exigió. Yo empecé a detectar que los sordos no entendían a los intérpretes, entonces empecé a interpretar por ellos, cuando logré interpretar, para todos lados me llevaban pero yo creo que ahí existe muchos celos por parte de otros intérpretes”.
“Al inicio solo podía interpretar si tenía enfrente a mi hermano César, porque luego sentía que me equivocaba”
“Que la sociedad aún no conoce la función de una intérprete, he llegado a eventos y me ponen un micrófono. No tienen idea de lo que voy a hacer”.
En la mayoría de los casos se interpreta el mensaje en Lengua de Señas para las personas sordas, únicamente en caso de que una persona sorda vaya a dar un mensaje, el intérprete le da voz.
“También me han tocado situaciones en hospitales o juicios donde una seña lo cambia todo“.
“Hubo un caso de una joven, que había sufrido abuso por parte de su padrastro, y su papá biológico la protegía desde Estados Unidos. En el caso había una persona interpretando mal lo que resultó en un verdadero desastre, volviendo muy confuso el juicio”.
“Resulta que la seña de padrastro, es la mezcla de la palabra papá más la palabra falso. Como la seña no se hacía bien, en el juicio entendían al revés, que su papá había abusado de ella y su padrastro era inoccente. Cuando llegue yo a tomar el lugar del intérprete que estaba, el juicio estaba muy confuso”.
“Y yo creo que lo más difícil en cuanto a señas o palabras, serían las de Andrés Manuel, porque él tiene un léxico diferente con frases como “me canso ganzo”, al inicio yo no las entendía bien”.
“Es complicado porque al momento de interpretar tienes dos segundos para cambiar la oración a lengua de señas. Tienes que explicar primero qué significa y luego hacer la seña”.
Además, Adriana comenta que hay mucho camino por recorrer y cosas por conocer, por ejemplo que se les llama “intérpretes” no traductores, se dice “sordos” no sordomudos y que ser intérprete requiere de preparación, respaldo de la comunidad sorda, y aunque a las personas sordas no les cobra por interpretar, si es un trabajo que debe ser pagado por parte de otras instituciones.
“A nivel nacional hay un acuerdo entre intérpretes profesionales y sordos líderes, en donde el intérprete es el que forma la gramática y trabaja únicamente para hacer el puente de
comunicación“.
“A un intérprete profesional jamás lo vas a ver enseñando señas porque este trabajo se les está dejando a la comunidad de sordos, debido a que es su idioma, tiene una lingüística
y toda una gramática que nada más ellos conocen porque es su lengua materna“.
“Entonces qué mejor que aprenderlo de alguien que es su propia lengua, es como si alguien que tomó un curso de seis meses le dice que es mejor que un extranjero que nació en los Estados Unidos, que siempre ha dominado el inglés, ¿pues no verdad?”.
“Yo creo que para formar una sociedad verdaderamente inclusiva, muchas veces vemos dentro del gobierno que dentro de sus ejes viene la inclusión, pero no es así”.
“La sordera es una discapacidad fantasma, no se ve. Entonces a comparación de cualquier otra discapacidad las personas sordas tienen que interactuar para que tú te des cuenta que son sordos”
“Mientras vivimos en un mundo de oyentes, no es posible que el sordo se siga sintiendo extranjero en su propia tierra”
“Yo creo o que una de mis metas es dedicarme a ser maestra porque soy licenciada en la educación, pero también quiero tener una escuela para las personas sordas porque hay una única escuela en Torreón, que abrca de jardín de niños a primaria y el cupo se termina muy rápido, dejando muchos estudiantes en lista de espera”.
“Me gustaría también que la televisoras cuenten con intérprete de lengua de señas todos los días, actualmente en el noticiero que interpreto solo es los lunes y estaría bien que al menos fuera de lunes a viernes”.
“Yo creo que sí hemos avanzado mucho, pero falta muchísimo camino por recorrer”.